
We are searching data for your request:
Upon completion, a link will appear to access the found materials.
El tomate, el café, la sangre, el maquillaje, el óxido… esas temidas manchas que, cuando aparecen, dejan huella. Con estos pequeños trucos te recordamos que todo es posible. Vuelve a disfrutar de tus tejidos y olvídate de frotar una y otra vez.
MANCHAS DE TOMATE
Para eliminar la mancha mezcla previamente amoniaco diluido y jabón. Frota enérgicamente. Después, introdúcelo en la lavadora y verás como termina de limpiarla.
MANCHAS DE CAFÉ
Esas manchas del café solo tienen los días contados. Cuando sucedan, absorbe el exceso con papel de cocina y derrama por encima un chorro de agua con gas. Vuelve a absorber con papel de cocina. La mancha irá desapareciendo a medida que repitas el proceso.
MANCHAS DE ACEITE
Primero, deja secar la mancha. Una vez esté seca, aplica un producto quitagrasas como el que utilizas en tu cocina. Hazlo directamente sobre el tejido y frota. Después, lava en la lavadora como lo haces normalmente.
MANCHAS DE SANGRE
Heridas en el parque? Tranquila. Para quitar restos de sangre, pon en remojo de agua fría el tejido. Después, con detergente para lavar a mano, frota en la zona manchada y vuelve a dejar en remojo unos 15 minutos más. Aclara y lava normalmente en la lavadora. Si la sangre está seca, puedes aplicar agua oxigenada sobre la mancha.
MANCHAS DE MAQUILLAJE
Si el maquillaje es reciente, aplica una toallita desmaquillante sobre el tejido, frota y deja secar. Si no es reciente, sumerge en agua templada, un chorro de limón y una taza de vinagre tu prenda. Frota y después, lava normalmente. Puedes limpiar las manchas de labial rojo con una mezcla a partes iguales de amoniaco y agua oxigenada para profundizar más.